La planta y la producción de Pimientos
La planta del pimiento es una planta a cultivo anual que tiene su máxima producción en el período primaveral y veraniego: esta variedad de planta es sensible en efecto al frío repentino y al viento excesivo.
El tamaño de los frutos, es decir de los pimientos que la planta produce, varía según las temperaturas en las que la planta de pimiento es cultivada: ellas en todo caso nunca tienen que ser inferiores a los 12-18°.
Precisamente porque la planta del pimiento tiene grandes exigencias climáticas, la siembra puede variar según la temperatura ambiental: se puede sembrar en los primeros meses del año en los países más meridionales con temperaturas más templadas, mientras es mejor esperar la estación primaveral para sembrar los pimientos en aquellas zonas más norteñas, en las que pueda que hayan temperaturas más rígidas. En algunos casos la planta de los pimientos puede ser sembrada y cultivada en invernadero u en vaso durante los meses más fríos, y trasladada luego al aire libre durante la estación veraniega.
A pesar de que el pimiento sea un producto hortofrutícola típicamente veraniego, esta hortaliza está presente todo el año sobre los bancos de mercados hortofrutícolas y supermercados internacionales, en cuánto su cultivo en invernadero es fácil y extenso.
Los pimientos gozan de una amplia importación por las cuencas del hemisferio meridional, también durante el período invernal y primaveral.
El terreno que la planta de pimientos prefiere es un terreno suelto (blando y poco compacto, siendo esta una planta con raíces que no han elevada capacidad de succión), ácido, rico en calcio y bien drenado; ella necesita de abundante abono y de un ingente y constante riego, sobre todo durante la fase de crecimiento de los pimientos, en cuanto una escasa cantidad de agua puede parar el desarrollo de este producto hortofrutícola.
Además del frecuente riego, la planta del pimiento necesita ser limpiada constantemente, eliminando las malas hierbas, que tienden a crecer exuberantes a la base de las plantas de pimientos, precisamente gracias a la fertilidad del terreno mismo.
El pimiento tiene planta de fuste erguido y ramificado, de la forma parecida a una mata; la altura optimal de esta planta es de 15-20 cm, pero también en las variedades de pimiento cultivadas (además que en aquellas ornamentales) puede alcanzar una altura que varia de los 40 a los 80 cm según la especie. La planta de pimiento no necesita particulares palos tutelares pero, teniendo fustes frágiles, si cultivada en zonas bastante ventosas es buena norma atar el fuste principal a una corta caña de bambú.
Las hojas de la planta del pimiento se presentan ovaladas y brillantes, de color verde claro, mientras que las flores son pequeñas y de un color que va del blanco al verde: estos últimos pueden tener de los 5 a los 7 pétalos por flor, mientras que los estambres son de color amarillo tenue. Las flores de la planta del pimiento pueden autofecundarse o ser polinizados por insectos de muchas especies: más alta es la producción de flores, más alta también será la producción de pimientos, aunque la calidad del pimiento viene en fin determinada por la carnosidad del fruto mismo.
El fruto o baya de este planta, precisamente el pimiento, puede tener postura erguida o pendula según las muchas variedades de pimiento cultivadas, y se presenta vacío en el interior y semicartilaginoso; de color verde al principio, llega a maduración a tener colores brillantes y luminosos que varían del rojo al amarillo. Al interior del pimiento, es decir en la cavidad de la hortaliza, hay semillas generalmente concentradas a la base del pedúnculo y pegadas a un soporte blanquecino y esponjoso, de donde en algunas variedades de pimiento parten filamentos (placenta) que recorren todo el largo del pimiento mismo.
Las muchas variedades del pimiento se distinguen entre ellas por las características del fruto mismo, que puede asumir muchas formas: el fruto del pimiento puede presentarse en efecto cuadrado, cónico o alargado, de muchos colores, del pimiento amarillo, al rojo al verde, hasta el color moreno. Menos importante es la diferencia de sabor, que puede ser dulce o picante según las variedades de los pimientos.
Las adversidades de la planta de los pimientos pueden ser varias, algunas de las que son: el golpe de sol, debido a una repentina exposición de los frutos a los rayos solares, que provoca unas quemaduras que forman áreas descoloradas sobre el pimiento que pueden volverse en una segunda fase podredumbres; la podredumbre apical, debida a períodos de seco alternados a períodos de abundante riego: se manifiesta precisamente con podredumbre sobre la parte apical que luego se difunde sobre el entero pimiento; enfermedades fúngicas, ellas provocan la obstrucción de los vasos vasculares a la base de la planta con consiguiente y repentino marchitamiento de los pimientos; y por fin las bacterias, que pueden provocar la podredumbre de hojas y frutos.
Para evitar el presentarse de estas adversidades que pueden perjudicar seriamente la planta y la producción de los pimientos, es aconsejable utilizar marcos de plantación ampliados que favorecen la mayor circulación de aire entre las plantas de pimiento y una correcta distribución de la luz, utilizar casi únicamente sustancias orgánicas bien compostadas limitando los abonos nitrogenados, evitar de mojar las hojas durante el riego de la planta y cortar los pimientos utilizando tijeras y no arrancando las bayas de las plantas, para evitar de provocar laceraciones a los tejidos mismos de la planta.
El pimiento se recoge en muchos estadios de maduración según su empleo tanto como hortaliza fresca como en la industria; si destinado a la producción de encurtidos, el pimiento será recogido cuando todavía no maduro y verde, mientras, si consumido fresco o destinado al envasado, el pimiento será recogido al principio de su maduración, cuando empieza a tener coloración amarilla o roja. Por fin, si destinado a la desecación, el pimiento será recogido a completa maduración.
La producción del pimiento es abundantemente difusa a escala mundial, y es estimado que los cultivos de este producto hortofrutícola superen acerca del millón y medio de hectáreas cultivadas en todo el mundo.
Los mayores productores de esta hortaliza fresca a escala mundial son Asia, América, África y Europa, mientras a nivel europeo los mayores productores de pimientos son España, Francia, Holanda, Alemania e Italia.
En Italia la mayor producción de pimientos se obtiene sobre todo en las regiones meridionales con climas más favorables al crecimiento de esta hortaliza como Sicilia, Apulia, Calabria y Campania, con una producción anual total de aproximadamente unos 3.500.000 quintales sobre una superficie igual a 185.000 hectáreas (datos 2010).
Las prevenciones efectuadas por los productores de pimientos, los distribuidores de pimientos, las empresas hortofrutícolas que producen pimientos biológicos y las empresas hortofrutícolas productoras de pimientos biológicos consisten en varias técnicas, entre las cuales hay una rotación adecuada entre los cultivos hortofrutícolas (hortaliza fresca y hortalizas frescas alternadas), la evitación de estancamientos hídricos y de siembras de pimientos demasiado densas, los riegos regulares y constantes de los terrenos dedicados a la producción de pimientos y a la producción de pimientos biológicos, la eliminación de los restos de producto hortofrutícola infecto y por fin los abonos nitrogenados o efectuadas con productos cúpricos (no para las empresas productoras de pimientos biológicos, para las que los tratos a base de sustancias químicas están prohibidos por los reglamentos de certificación de la Unión Europea).